.Pasamos más tiempo HABLANDO de amor que HACIÉNDOLO.

Yo te miraba en espiral porque te amaba pero quería salir corriendo, mis dedos no sabían ya pronunciar una caricia sin que surgiera un nuevo temor desde las yemas. Incapaz de mirar a las decepciones a la cara, volvía de lleno a tu centro, a derramarme, a licuarme, a llenarte de blanco la oscuridad, a dejarte pringada la soledad...mi forma de hacer el amor un deporte de riesgo.

Sigo buscando en los v e r s o s eso que todos sabemos sentir pero que A Ú N no hemos sido capaces de explicar.

viernes, 16 de diciembre de 2016

se puede huir de todo, menos de lo que se pierde-

claro que me acuerdo cada una de tus re-putas fechas importates, me las acuerdo de memoria sin necesidad de alarmas ni calendarios coloreados pegados en la heladera. me acuerdo cada una de esas fechas y espero, espero que se haga esa hora en la que sé que tus pulsaciones aumentan y la cabeza te está por colapsar para decirte que todo va a salir bien.

esperaba esos días con tanta ansiedad como sin fuesen propias tus victorias,
y es que un poco lo eran,
la batalla verdadera comenzaba al vernos y siempre terminaba en triunfo,
doble triunfo,
el tuyo y el nuestro.
pero ya no puedo esperar más,
porque ya no hay nosotros
ya no hay triunfo compartido
somos vos
y yo
por separado


ésta batalla está perdida.
pero antes de sacar bandera blanca, tengo una última carta que jugar.

(yo nunca pedí, lo que vos me diste)

viernes, 4 de noviembre de 2016

cada uno elige el modo de volarse


no puedo mirarte y articular las palabras justas para decir lo que quiero decir sin pudrirla. necesito que no alimentes más éste bardo emocional. necesito que dejes de licuarme los sesos. necesito que dejes de ser la gota molesta que cae en la bacha de madrugada cuando todo es silencio y no deja dormir. necesito que dejes de ser ese load battery en rojo en tiempo de descuento, la alarma que suena en mi cabeza cada 5 minutos y ya no puedo posponer. necesito escaparme de esto que tenemos porque me muero de miedo, porque no tengo los huevos para ir y decirte lo que pasa acá adentro, dónde cada palabra tuya rasguña y desgarra.
elijo frenar.
elijo bajar acá.
elijo correr(me) de éste acierto-error
elijo escribir acá todo lo que no sabés y habla de vos
elijo no dar pelea a esta batalla, a ésta guerra dónde no debí entrar
elijo no contarte como me siento, como estuvo mi dia, si llegué o no casa,
elijo un abrigo a tu abrazo.
elijo no tener planes con vos
elijo poner una distancia entre lo que digo y lo que siento
elijo entrecortar las palabras, hacerlas desaparecer
(y desaparecer con ellas)
elijo cambiarte de cuerpo, de cara y de piel
elijo borrarte de mis dias y noches
elijo no saber de vos
elijo esquivarte de dónde estes.

te odio
(al reves)










martes, 18 de octubre de 2016

Punto para vos.


cuando todo fluye con tanta claridad, es porque hubo un mano a mano con la oscuridad y si de mano a mano con la ocuridad hablamos puedo asegurarte que sé un montón. el probema es cuando te encariñas. el problema es cuando la carne que busca sólo carne, encuentra algo más carne. el problema es cuando aparecen batallas por librarse -que creias ganadas-.el problema es cuando presumis tener las cosas claras. el problema es el abrazo en el que pienso en silencio, el problema -y dejame decirte que no sé en qué tiempo conjugar el verbo- fue/es tu compañia a diario y tu compañia el dia que no tenías que estar, el problema fueron/son tus cosquillas y tu risa a carcajadas los domingos, la vuelta a casa, los nervios que me generas cuando me decís que estas por llegar. el problema fue y es que yo no tengo resuelto el temita de "dejar que las cosas fluyan" porque evidenentemente me aterra el fluir de todo esto, me aterra la idea de pensarme en un lugar que creo no quiero estar. 
es que me aterra pensar en vos, odio pensar en vos, odio hablar de vos. odio estar vomitando esto porque tu mensaje de las siete y media de la tarde no llegó y tuve un dia del orto y es lo único que necesito para que todo lo que sigue de acá en adelante me chupe bien un huevo. odio tener 5 conversaciones pendientes en el celular  y no contestar porque ninguna dice tu nombre. odio el momento en el que me aguanto las ganas de decir que te quiero ver, odio el momento en que empiezan a aparecer esos silencios incómodos porque los dos nos estamos dando cuenta de que ésto se está yendo a la mierda, así que no me invites a dormir, porque eso implica mirarnos a los ojos y abrazarnos toda la noche hasta conciliar el sueño y yo no quiero soñar con nadie. no me preguntes como estoy 20 minutos despues de haberte dicho que me sentia mal porque la presión se me va al suelo. no me llames de madrugada con la excusa de que necesitás despejarte porque te juro no entiendoo nada, no me invites a caminar de noche porque a éste insomnio después no lo cura nadie. no quiero que despiertes y ser la primer persona a la que decis buen dia, no quiero saber que soy la última con la que hablas antes de apagar el celular. no quiero que me preguntes como amanecí, en qué ando, cómo fue mi dia, que voy a comer o si ya llegué a casa, no quiero. no quiero sentir tu perfume en mi cama y abrazar la almohada que usaste, no quiero. no tengo ganas de perder la libertad mental que hace que todo el tiempo te este pensando. no tengo ganas de explicar (te/me) que hay dias en que quiero salir corriendo porque me muero de miedo.

Dejame desconocerte
Quiero rajarme a la mierda de acá.




martes, 16 de agosto de 2016

Del latín 're-cordis'

¿qué sabes de mi para mirarme así? 
qué sabes de lo que pienso, lo que vivo, lo que como, lo que digo, lo que callo, lo que escucho, lo que leo, lo que lloro, lo que río, lo que escribo,
qué sabes de mis colores, libros, canciones y silencios,
qué sabes de mis batallas, a quien amé, a quién odié, quién me lastimó y cuánto dolió,
qué sabes de cómo llego a mi casa, por qué las manos frías, la piel seca, lo que llora mi cuerpo, los nudos de mi espalda que hacen moños de buenos recuerdos de tu paso por acá,
qué sabes de lo que hablan mis manos, cómo llegan a ser éstas las que hoy quieren tocarte,
qué sabes de mis karmas, de las marcas que llevo en la piel, de las huellas que hoy son identidad,
qué sabes de mi risa cómplice como buscándote entre los sin rostro cuando alguién pregunta por vos,
qué sabes de mis ganas de ponerle dueño a mis noches, de darle nombre a mis sábanas, de verte de refilón aunque sea una vez al día ¿qué sabes?,
qué sabes de mis miserias, cuál es mi norte y lo que escondo bajo la alfombra,
qué sabes de a quién le escribo, a quién maldigo, a quién deseo y a quién espero,
qué sabes de invadir mis pensamientos, cambiarlos de lugar, de forma, enroscarte en ellos y comerte unos a otros hasta tirarme desnuda al suelo.
qué sabes de invadir mi tiempo, mi ropa, mi espacio, mis horas de trabajo,
qué sabes de mis dolores encerrados, mis tormentas a sol abierto, mis amaneceres a la intemperie pidiendo tregua a la constelación de turno,
qué sabes de mi sonrisa hueca, mis piernas largas y la luna sorda de abrazar mi grito defensivo,
qué sabes de cómo duele cuando me hablás pronunciando palabras que ya escuché,
qué sabes de dejar el orgullo a un costado, de mi sensación de que por momentos todo da igual, cuando la transformación es sólo un suspiro de auxilio,
qué sabes de no poner precio, de quedarte mudo observando(te), descifrando(te), entregando(te) mis palabras que no se las lleva ningún puto viento
qué sabes de mi entrega para darte lujos sobre mi, de mi espera desesperada,
qué sabes de lo que defiendo, mi amor, de lo que me sale de las entrañas, de lo que salpican mis ojos,
qué sabés de mi cabeza en tu vientre alarmando colapsar de emoción,
qué sabes de lo que transpira mi cuerpo, de mi lengua en llamas haciendo acrobacia en tu boca,
qué sabes de tener tu nombre entre los dientes.

¿qué sabés de mi para mirarme así?


domingo, 7 de agosto de 2016

otro jueves cobarde

qué nervios si te cruzo
cuando todavia tengo la almohada marcada en la cara
los ojos achinados porque los párpados me pesan
y el andar lento de un cuerpo que a esa hora de la mañana todavia no coordino

qué nervios si te veo llegar,
mientras intento ubicarme en tiempo y espacio,
mientras comienza a hacerme efecto la cafeina,
mientras pienso que esto es cualquiera.

qué nervios sostenerte la mirada
sin desviarme a contarte los lunares
(todos y cada uno de tus lunares)
que me preguntes no sé qué,
contestarte no sé cuánto,
y terminar en no sé dónde.
(y seguir contándote lunares)

qué bronca si te escondes
entre letras que no se pueden descifrar
palabras que no se pueden pronunciar
dialógos dificiles de sostener..,
tu forma de hacer de la profesión
un arma de seducción

que nervios
si volves a mirarme de esa manera
cuándo cruzo esa puerta,
con las ideas aturdidas
y la cabeza desordenada.

domingo, 31 de julio de 2016

mereces lo que tienes
y un poco de lo que no, también

sábado, 25 de junio de 2016

todos escribimos
para vomitar lo que no decimos.

martes, 17 de mayo de 2016

sé de mi,
menos que vos.

domingo, 10 de abril de 2016

Saudade de la piel, 
del olor, 
de los besos. 
Saudade de la presencia, 
y hasta de la ausencia consentida.  



(en alguna otra vida, debemos haber hecho algo muy grave para sentir tanta saudade)

martes, 23 de febrero de 2016

prometeme la sonrisa eterna
la mirada en calma
la mente en paz


jueves, 14 de enero de 2016

abrazar todas las mañanas de todos los días.
abrazar la rutina nocturna del desvelo,
del cuerpo cansado, de las pupilas dilatadas,
de los parpados que el frenesí no deja dormir.

abrazar el presente que en el pasado deseaste.